DESCUBRE LOS 5 ERRORES QUE DEBES EVITAR SI QUIERES MANTENER EL ESTRÉS BAJO CONTROL EN TU VIDA

1.- Pensar que el estrés, por sí mismo es negativo.

Cuando hablamos del estrés, solemos hacerlo con una connotación negativa, entendiendo que por sí, es algo malo.

Pues hemos de saber que nuestro organismo siempre se encuentra en un estado de estrés mínimo ¿buena noticia verdad?.

Y ahora es cuando podemos pensar: “Si ya sabía yo que esto del estrés, no tenía que ser tan malo!!”

Pues si, por nuestra supervivencia estamos programados con un mínimo de nivel de estrés latente, para que ante determinadas situaciones, pueda incrementarse y producir una respuesta en nuestro organismo que en muchas ocasiones pueda salvarnos la vida.

Ante una situación de amenaza para tu equilibrio, tu organismo elabora una respuesta con el fin de intentar adaptarse. Un conjunto de reacciones fisiológicas desencadenadas por cualquier exigencia ejercida sobre el organismo por la incidencia de cualquier agente que considera (que no quiere decir que lo sea) nocivo llamado estresor.

O dicho de otro modo, la respuesta física y específica del organismo ante cualquier demanda o agresión, ante factores que interpreta como agresores que pueden ser tanto físicos como psicológicos.

Si si, físicos o psicológicos. Nuestro organismo responde tanto al león físico como al continuo pensamiento de “en cualquier momento va a venir el león” “ y si el león viene” … puesto que no diferencia lo “real de lo “figurado”.

Y aquí es donde esta la diferencia POSITIVO o NEGATIVO, dependiendo de si la reacción del organismo es suficiente para cubrir una determinada demanda o bien esta reacción “supera” a la persona.

Este nivel de equilibrio dependerá de muchos factores, los unos individuales como la disposición biológica y momentum psicológico de cada cual como de las distintas situaciones y experiencias.

Y alrededor de esta medida es donde el estrés es justo y necesario o puede empezar a ser un problema en tu vida.

Todos conocemos el típico ejemplo del señor que está en la selva y ante la presencia del león, su mecanismo de alerta y estrés se eleva y es cuando genera una estrategia (sin tiempo ni a pensar, pues el raciocinio queda anulado en este momento), que normalmente suele ser de huida. O sea “pies para que os quiero”.

En algunas ocasiones, también puede paralizarte, como estrategia. En la naturaleza también hay muchos ejemplos, como ocurre a veces con los antílopes cuando se ven ante un guepardo, “se hacen literalmente los muertos” hasta que el guepardo se marcha, logrando al menos de momento su objetivo, seguir con vida.

Buff! Espero y deseo que si es tu caso y estás ante un león, tu cuerpo active la huída! No quiero pensar que ocurriría si te paraliza!!!

Y mucho menos si te diera tiempo a pensar: “ahí esta el león y viene corriendo a por mi, ¿Que querrá? ¿Que intenciones tiene? La verdad es que no trae cara de amigos….

¿Te imaginas en ese diálogo interno mientras tu león se acerca vertiginosamente???

Y aquí es cuando tiene cabida este dicho de “no hay palabra mal dicha sino mal interpretada”.

Y así es como actúa tu organismo, además de estar atento a los procesos y agentes exteriores, que son importantes, claro que sí. Escucha tu diálogo y actúa respecto a él, no entiende si lo que te estás diciendo a tí mismo es una mera hipótesis o es tan real como el león.

Así que, tengamos en cuenta que con nuestro diálogo interno y con nuestros pensamientos e hipótesis, podemos hacer disparar muchos mecanismos en nuestro organismo.

Podemos elegir pensar que el vaso está medio lleno o medio vacío, esto sí que es una elección. Como puedes comprobar, lo que eliges pensar y la forma en que te comunicas contigo misma, tienen una alta repercusión en tu organismo. Tenlo en cuenta!

Seamos conscientes de ello y que juegen a nuestro favor y no en contra.

Recuerda: tu misma, eres tu mayor amiga y tu peor enemiga, no lo dudes.

¿Que opinas? ¿Te parece una realidad incómoda? ¿Estas dispuesta a asumir esto? ¿Tienes alguna duda o circunstancia a resolver?

En esta senda me encontrarás siempre, ya sabes que estoy a tu disposición!!

 

2.- Tomar café o bebidas energética y azucaradas para combatir el agotamiento.

Cuando estás ante una situación de estrés mantenida y para aguantar el tirón es muy común usar y abusar del café y ó de las bebidas energéticas y azucaradas para combatir el agotamiento.

Como por ejemplo, cuando hemos de entregar un trabajo para una fecha y por una circunstancia o por otra vemos que no vamos a llegar, en pos de acabar cuanto antes echamos mano de dosis extra de cafeína o bien de bebidas azucaradas y estimulantes que prometen mucho pero aportan poco.

En cualquier caso le estás metiendo al cuerpo una dosis de “… (el calificativo te dejo de libre elección) comestible” en toda regla.

Y estás aumentando metabólicamente la ocasión de tener a posteriori un bajón físico y una falta de claridad mental que te haga estar aún mucho peor, además de conseguir muchos más boletos para un envejecimiento precoz y entre otras tantas posibilidades, la de enfermar.

Y entras así en un circulo vicioso del cual te es difícil salir.

Hay muchas formas de poder llevar estas situaciones, de forma natural, saludable, sin cambios de humor, ni …. pero eso, es harina de otro costal, lo abordaremos en otro momento, te lo prometo!.

 

3.- Tomarte una valeriana.-

Pensar que si te tomas alguna infusión relajarte va a fulminar tus problemas de estrés es un gran error.

La valeriana, como muchas otras plantas, se ha venido utilizando tradicionalmente para conseguir relajar el sistema nervioso, dormir mejor o para aliviar el estrés y la ansiedad por sus propiedades botánicas.

Y es cierto y bien cierto, o por lo menos esa es mi experiencia. Y que conste, que yo la uso y muchas de mis clientas también, en ocasiones, claro está y con un objetivo definido.

Pero bien distinto es puntualmente tomarte una valeriana para ayudarte a pasar una época o un proceso concreto y determinado en el tiempo, a creer que si te tomas la valeriana todos los días tus problemas de estrés se van a diluir.

Si de fondo hay una situación sin resolver o un problema que afrontar, la valeriana hace su trabajo ayudando a llevar el proceso, desde luego.

Pero la solución pasa también por tomar cartas en el asunto y actuar en la dirección de la resolución del conflicto que te origina el exceso de estrés o el estrés mantenido y sostenido en el tiempo.

Tómate una valeriana cuando quieras, faltaría más! Ya sabes que es lo que puedes esperar de ella, utilizala a tu favor.

 

4.- Seguir consejos y recetas de conocidos:

Aquí ya hay amplio abanico de posibilidades y todos hemos compartidos en uno u otro momento lo que nos ha sido efectivo a nosotros, con nuestros amigos y conocidos, lo que no implica que eso sea lo mejor para todo el mundo.

Lo mismo tus conocidos te cuentan lo que a ellos les ha ido bien, que no implica que tu caso sea el mismo.

Seguro que alguna amiga te ha dicho alguna vez que le va genial salir a correr cada día. Y resulta que tu tienes una lesión en la espalda, posiblemente no te vaya bien el deporte de impacto, por lo que a ella genial, pero a ti fatal!

Puedes recoger todos los consejos que te sirvan, desde luego. No es oro todo lo que reluce.

Mi consejo, con mucho cariño: si quieres cuidarte, controlar el estrés y mejorar tu vida, consulta con un experto, directamente, déjate de rodeos y atajos, vete a lo seguro. Recuerda que es tu bienestar el que está en juego. ¿Cuanto valor tiene para ti?

De nuevo, aplica la conciencia y la coherencia contigo misma.

Recuerda que tu eres única e irrepetible y debes conocerte, serte fiel a ti misma y saber lo que te va y lo que no te va, por mucho que esté de moda o que lo practiquen tus mejores amigas.

 

5.- Buscar en internet información gratis.

Hoy en día, en Internet se encuentra la más grande fuente de información… y sigue creciendo.

Hay tanta información! Abunda la cantidad, desde luego, pero no siempre la calidad y muchas veces la veracidad y efectividad.

Gratuitamente puedes encontrar muchos contenidos, habitualmente dispersos y ahí vas, a salto de mata, esto de aquí, lo otro de allá….

Recuerda que uno de los bienes más preciosos que tienes es el tiempo, y sin duda el más valioso tu cuerpo. Cuídalo, cuídate como te mereces, invierte en ti, seguro seguro seguro que lo agradecerás.

A modo de resumen, aquí tienes los cinco errores que debes evitar si quieres mantener el estrés bajo control en tu vida.

1.- Pensar que el estrés, por sí mismo es negativo.
2.- Tomar café o bebidas energéticas y azucaradas para combatir el agotamiento.
3.- Prepararte una infusión de valeriana.
4.- Seguir consejos y recetas de conocidos.
5.- Buscar en internet información gratis.

Ahora es tu turno, ¿con cual de ellos has tropezado más veces? Me encantará que respondas en los comentarios. Hablamos?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Únete ahora
al Taller Online